Anoche cené solomillo con salsa de boletus (omito la receta porque por la red circulan miles y la mía la improviso de cuando en cuando) y he acabado con la reserva de los que tenía secos (o deshidrados que ahora se lleva más el término), aunque no con los que tengo en polvo (de esos tengo buen arsenal). El homenaje (es un manjar) me ha abierto las ganas de hacer una incursión campestre y ser yo misma la que recolecte unas cuantas setas, que termina la temporada y luego pasa lo que pasa, que no hay provisiones. En los últimos años han proliferado (como setas, jaja) los recolectores aficionados con los peligros que eso conlleva: el primero el riesgo para ellos mismos por el desconocimiento que tienen de ellas y el segundo cómo arrasan el campo algunas personas, sin respetar nada y arrancando todo lo que tienen por delante. En el sitio de mi recreo intentan ponerle freno impartiendo pequeños cursos o charlas donde distinguen las comestibles de las que no lo son y, este año, como novedad, para salir hay que disponer de un permiso que, previo pago de su importe, te permite recogerlas legalmente. Los que tenemos arraigo (con casa allí) o estamos allí empadronados (como es mi caso), tenemos una tarifa especial y el resto una bastante más elevada. Sé que esto levanta ampollas entre los que defienden que "el campo es de todos" pero, partiendo de la base de que eso no es cierto, yo estoy totalmente a favor.
Bueno, a lo que iba. Son poquitas las que yo conozco y las que me atrevo a coger:
El Boletus Edulis, que creo que hay que tener un don especial o saberse los sitios, porque sí, lo conozco, pero no lo cazo nunca:
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El níscalo. Que es el ideal para principiantes porque es fácil de reconocer. Luego no mes los des que no me gusta comerlos, pero lo bien que se pasa cogiéndolos ... Nosotros vamos con los niños, con sus cestitas, en un raso y lo pasan genial.
El níscalo. Que es el ideal para principiantes porque es fácil de reconocer. Luego no mes los des que no me gusta comerlos, pero lo bien que se pasa cogiéndolos ... Nosotros vamos con los niños, con sus cestitas, en un raso y lo pasan genial.
La seta de cardo. Es mi favorita. Para mí, la más deliciosa de todas las setas (y la más accesible, por mucho que alguno se empeñen en complicarse la vida).
Y la colmenilla, que cogí en tiempos con mi abuelo (donde voy ahora no hay), pero que prefiero que me invite mi jefe a ese restaurante de la calle Jorge Juan donde las preparan con foie y están que te mueres.
Y las que nunca, nunca, debo coger y ni siquiera toco.
La muscaria. Que es la más bonita y llamativa de todas, pero alucinógena y muy tóxica.
Y la amanita faloide. MORTAL. Y si no que se lo digan a unos cuantos tailandeses que la comieron en Soria (creo que unos 11 o 12) y acabaron todos en la UCI hace unas semanas o a esa familia de Guadalajara que acabó igual en los mismos días.
Las fotos son preciosas, pero por desgracia, no son mías.
¿Os atrevéis con las setas? ¿Cuales conocéis?
Yo no... porque no he salido nunca a por setas pero me encantaría hacerlo.
ResponderEliminarEl minicursillo que nos has dado me ha venido de perlas
Puff! Para mi gran ignorancia en el tema, esto es un master! Si algún dia me decido en ir a buscarlas, mirare este post antes! Sin duda!
ResponderEliminarSoy campestre, pero le tengo mucho respeto (y miedo) a las setas. Solo cojo y como espárragos.
ResponderEliminarComo las setas que venden en los supermercados, así tengo a quien demandar si me intoxico... de hecho, la semana pasada mi marido trajo una bolsa de níscalos cogidos por un compañero suyo de trabajo que no toqué y si no es porque me vio las intenciones y se la dio a una hermana suya acaban en el cubo de la basura.
Creo que mejor prevenir que curar en este caso.
Un beso.
Me vuelvo al zulo.
Me ha gustado mucho tu entrada de hoy , pensaba yo poner unas fotos de setas que vemos en la sierra pero me las guardaré , cuando vaya a la sierra recogeré setas y te las llevo para que me digas si se pueden comer , nosotros vemnos y no tocamos por si acaso
ResponderEliminarUn abrazo
Yo de setas no entiendo nada. Mi madre siempre refiere los níscalos, pero a mí, tampoco me gustan. Las ótras, no las he probado; por aquí, no las veo demasiado.
ResponderEliminarConozco algunas pero por falta de seguridad nunca las recojo, por si las moscas...
ResponderEliminarEn la aldea donde vamos los fines de semana dan cursos todos los años en el ayuntamiento, mi suegra ha ido y recoge unas buenisimas para hacer rebozadas y fritas (del nombre ni idea), pero esas y solo esas.
Reconozco que a veces tienta cuando paseo por el monte pero de momento prima mi sentido común (anda si tengo y todo! jajajaja).
Ya que estamos y por pedir que no quede, puedes hacer un tutorial de como se secan, se hacen polvo y to eso...pa aprender de la jefa na más...jejejeje
Yo la que reconozco es el níscalo, no me atrevería a coger ninguna otra. Desde pequeña en el sitio de mi recreo salía con mi padre las tardes de otoño a recogerlos y me encanta comerlos.
ResponderEliminarHoy en día no se puede salir, por que no hay, el monte ha sufrido la explotación de todo el que va se lleva todo por medio y no están tan accesibles. Por eso estoy totalmente de acuerdo en lo que hacen en tu pueblo de que pague la gente que quiere recoger setas, hay gente que va por el campo, se cree que el campo es suyo, y se lleva cualquier cosa o literalmente rastrillan el monte arrasándolo todo, esta gente deja el monte destruido por completo.
Un besito.
Hay los niscalos, eso es por que no conoceis los mallorquines, aqui los llamamos "esclatasang" que traducuido seria algo asi como "que revientan en sangre" si parece un poco bestia, es por que cuando estan bien frescos dentro sacan un jugo rojizo y asados a la brasa primero con la copa para abajo y luego al reves sal, pimienta negra, limon y aceite. Los pones encima de dos lonchas de pan tostado con aceite y estan que te mueres de buenos, al menos para mi son un manjar los prefiero al caviar y cualquier otra delicatessen (que me encanta tambien)Os colgaria una foto para que viereis la diferencia pero no se como.
ResponderEliminarUn besote
Cuando era pequeña salia a coger setas con mis abuelos que nos enseñaron a todos a reconocer las setas que podiamos y no podiamos coger. Ahora ya he olvidado todo y les dejo la tarea de recolectar setas a mis padres que se les da de vicio. Cogen niscalos y setas de cargo a montones, no tengo ni idea de como son capaces de coger tantos. Los niscalos no me gustan mucho pero las setas de cardo me apasionan.
ResponderEliminarUn consejo que me dieron, nunca se regalan setas y por supuesto nunca se aceptan setas de nadie, como dice Nuria, las hay muy, pero que muy peligrosas.
Vaya clase magistral nos has dado. Yo no tengo ni idea por eso no toco nada del bosque. Los níscalos, aquí llamados rovellons, son muy apreciados por aquí pero a mí no me van mucho y en mi casa no hay quien los quiera.
ResponderEliminar¿ por qúé será lo atractivo siempre peligroso?
Besos,
Emma
Me encantan las setas.
ResponderEliminarPero mi conocimiento no pasa de reconocer las bandejas de champis enteros o en láminas en el supermercado :-(
Una vez lo intenté en el bosque pero me daba miedo coger una que no fuera buena y al final de la mañana no tenía ni una.
Yo lo dejo para los expertos.
Y me quedo con el níscalo (rovellón en mi tierra)Me comería un cesto entero.
Pues se agradece el cursillo acelerado de reconocimiento de setas, aunque me dan tanto miedo que nunca he ido a cogerlas ni creo que lo haga. Me fío de algunos miembros de mi familia que sí que controlan. Por supuesto, comerlas no me da ningún miedo ;p Y lo del monte es verdad, qué pocos escrúpulos tienen algunas personas y cómo arrasan con todo. Con la excusa de que "es de todos" se creen que es solo suyo. Y eso cuando no se meten en las tierras con dueño a ver lo que pillan, que en mi pueblo pasa mucho...
ResponderEliminarAna Colo.
Este año, no hemos podido "ir a setas", pero nos hubiera gustado, como hacemos todos los años.
ResponderEliminarNos a gustado mucho tu post, el pirncipio en el que nos cuentas lo que están haciendo en tu zona de recreo, y es que es cierto, es lamentable ver como se destrozan la setas que no se conocen, y se deteriora el campo, ahora que se ha puesto de moda.
Muchas gracias por este estupendo post que nos has preparado.
Besotes
Ana y Víctor.
A mi me gustan mucho los boletus (que de esos suelo tener deshidratados, ya que cogerlos, nunca fuí, ni sé dónde los hay) y los níscalos, me/nos encantan y como son facilitos de coger y reconocer, me pego una pechá a embotar..... así tengo durante todo el año y es un placer comer cualquier cosita cocinada con níscalos.En el pueblo de mi marido, no hay que pagar tasas en los pinares por coger setiñas.
ResponderEliminarBicossss y si te regalan níscalos yo estoy encantada en que me los mandes por seur(pago los portes eh?)
Marisa
no me van mucho... aunque con esto de ser celíaca de mayor... estoy empezando a comer cosas que antes ni me imaginaba....
ResponderEliminarla muscalia (o alguna parecida) es la que les hizo mucha gracia ver a los celíacos de la convivencia (y unas cuantas fotos que se hicieron)...
y allí detrás de ellos estaba yo haciendo de "pepito grillo"... diciéndoles que "fotos sí, pero ni la toquéis!"...
no sé nada de setas... pero justo se me quedó grabado eso de que la típica que ponen en los dibujos animados de casa para los pitufos y demás personajillos suele ser de las más peligrosas...
bikiños^^
me encantaria saber más de setas, hace poco estuve en la rioja en un sitio donde las ponen bueniiiiisimas, no tengo ni pajolera idea de como se cogen, pero me apetece un montón enterarme y cogerlas algún día.
ResponderEliminarGracias por la miniguía.
Mabel
Hace siglos que no voy a coger setas, de peqeña iba con mi padre y mi hermano, me encantaba, ahora van ellos sin mí y se empeñan en darme níscalos, que no me gustan nada.
ResponderEliminarPara mí la de cardo la mejor, sin duda.
Besines