1 cebolla grande
3 o 4 dientes de ajo picado
1 rabo (Aprox. 1.250 gr)
1 vaso de buen vino tinto (yo de Toro, otras veces uso Jerez dulce)
2 hojitas de laurel
3 zanahorias
Aceite de olvida
Sal
Preparación:
Dorar el rabo (de vaca, como todos los que venden, digan lo que digan) en el aceite de oliva y retirar. En el mismo aceite, pochar la cebolla, el ajo y rehogar finalmente las zanahorias. Añadir el rabo, el vaso de vino y las hojas de laurel. Dejar que el alcohol del vino se evapore y añadir agua hasta cubrirlo. Cocer en olla rápida 35 minutos. Si fuera necesario una vez abierto, dejar reducir (y apagar el fuego, no os pase como a mi hermana la última vez que lo hizo que se fue a la cama mientras reducía el caldito sobrante. Gracias Dios por permitir que siga teniendo una hermana, un cuñado y dos sobrinos).
Sé que ahora se sirve estupendamente sólo la carne y que tiene mejor presencia, pero qué queréis que os diga, soy nieta de mi abuela, a mí me gusta el hueso y para eso lo comemos en casa, para disfrutarlo como más nos guste.
No tenía intención ninguna de colgar esta receta. La hice el domingo y sobró lo que veis en la foto. Por circunstancias de la vida (¿Puedes dejar de maltratarnos? Gracias) tuve que hacer algo que no hago jamás: comer en casa un día entre semana y no sabía de donde tirar. Menos mal que al abrir la nevera, alli estaban ellos dos: los tupper con las sobras. Así que, no sólo salvé la situación, sino que además lo hice con un menú (creo), digno de restaurante: ensalada de pimientos con ventresca de primero y rabo estofado de segundo.
Si no fuera porque me quedaron seis minutos de reloj para tomarme el café después de recoger y porque tuve que lavarme los dientes cuando llegué a la oficina (con tal de llegar a la hora ...) diría, como mi padre, que como en casa no se come en ninguna parte.
¿Qué opináis vosotros? ¿En casa o a mesa puesta?
******************
8. Mi amiga S. y yo montamos las cajas y usamos frutas, verduras, cucuruchos, papel y báscula de verdad para jugar a las tiendas. Suerte que tenemos.
Uff!! Yo creo que depende del dia. Hay días que estás de humor y tienes las pilas a tope en los que no te importa pasarte todo tu tiempo en la cocina. Hay días que prefieres que te lo den hecho porque no puedes con tu alma.
ResponderEliminarY ese rabo está diciendo cómeme, cómeme.... que pinta que tiene el condenao!
A mí me gusta encontrarme todo por delante, pero más que nada, porque no es lo único que hacemos en el día. Eso sí, cada vez estoy más convencida de que con tiempo, y teniendo lo esencial, ¡como en casa en ninguna parte! Mi padre también lo dice...
ResponderEliminar¡Vaya pinta que tiene, y eso que yo, de rabos nada de nada!
Yo tambien lo prefiero con hueso.... y roer...
ResponderEliminarY hoy estoy especialmente cansada.. me gustaría llegar a casa a mesa puesta pero va a ser que no.
Besotes.
pues yo creo que como la comida de casa ninguna, miento, la de mama esta de muerte. Pero la comodidad de llegar a mesa puesta.....la solucion, comer en casa de mama a mesa puesta ;-))))
ResponderEliminarHummmm... es el guiso favorito de mi madre, lo comemos a menudo los domingos.
ResponderEliminarYo soy vaga, para que engañarnos más, si me lo dieran todito hecho (pero todo, todo y todo) creo que a estas alturas de la vida ya no protestaría la verdad... aunque reconozcamos que lo que se cocina en casa tiene otra calidad y otro sabor.
Maite
Marse,
ResponderEliminarA mí me fastidia a mediodía porque dispongo de tres cuartos a un hora de tiempo para comer. Esto es entre semana, los finde perreo a veces, pero vamos, commemos, jajaa
Alegría,
El cocinar, para mí es un placer, pero que se me va pasando en proporción al número de cosas adicionales que tenga que hacer. Si lo tengo todo recogidito y sólo tengo cocina, lo disfruto mucho, si es por obligación, me puedo llegar a mosquear.
Tu padre cocina ¿no? Es que el mío no, y así es muy fácil decir que es lo mejor, si no hces nada, jaaa!
Pikerita,
Jajaaa!! Yo también quiero chupar hueso y esa gelatinita.
Animo Lourdes, nada de cansancio, y si emocional menos.
Mondraker,
Ese es el plan ideal y el mío diario. En casa de mamá y a mesa puesta. ¿Se puede pedir más?
Maite,
Jajaaa!! Ya no te quejarías como cuando eras pequeña con tal de que te lo pongan y te lo quiten y te lo frieguen!
Justo este finde vamos a hacer rabo por primera vez, nunca lo hemos hecho antes ¡qué coincidencia!
ResponderEliminarUn besito.
Ohh adoro el rabo de toro (vaca hablando con propiedad)
ResponderEliminarPara mi junto a la carne de jabalí es de las más deliciosas, en mi casa es un plato tan poco frecuente que lo hago para Noche Buena. En Catalunya es difícil de encontrar en las cartas de los restaurantes, y comprarlo tiene que ser por encargo.
Yo lo guiso de una forma muy similar, pero con tomillo si mal no recuerdo.
Me encanta, lo adoro.
Petonets
No viene al cuento, pero estoy tan indignada: desde ayer no me permiten votar al blog de Pikerita xq me dice que ya he votado.
ResponderEliminarAsí no me extraña que siempre ganen los mismos ¿Has visto que caída después de ir en cabeza tantos días?
Crfeo que deberíais hacer algo al respecto, digo deberíais xq es vuestro proyecto, xq habéis invertido mucho tiempo y xq merece quedar entre los 5 primeros. Yo ya he mandado un mail para quejarme.
Besos
Coquelicot
Nieves,
ResponderEliminarPues verás que es muy facilito y muy agradecido. NO te pases con el agua y él solito triunfa.
Artemisa,
¿Has mirado en Mercadona? Yo creo que lo tienen en la sección de congelados cortadito y todo. Hablo de memoria, pero me suena haberlo visto.
¡¡Nosotros también comemos jabalí en casa!! Y nos gusta mucho. Ahora tenemos un choricito que está para morirte y qeu pienso utilizar para "preñar" ciertos bollitos que tú y yo sabemos.
Coquelicot,
Muchas gracias por intentarlo y por quejarte!! La verdad es que ha ocurrido algo y no sabemos qué. El fin de semana restaron 500 votos y anoche, en sólo dos horas, bajamos del 4º puesto al 11º.
Cuando pase el concurso voy a decir muy clarito lo que me está pareciendo.
A mí un salmorejo de primero y una colita de segundo es lo que más me gusta del mundo mundial.
ResponderEliminarY, sobre lo segundo, pues depende del día. Normalmente disfruto mucho comiendo en casa, la verdad pero en un buen restaurante de cuando en cuando... Eso sí, siempre me queda la sensación de hartazón después. Ya no estoy acostumbrada a comer ciertas cosas.
Besitos.
¿Qué C- - O pasa con el concurso? ¿Cómo podemos haber bajado tanto en unas horas? Aquí hay tongo
ResponderEliminarVoy a mandar un mail ahora mismo, a ver si los bloqueamos
No, mi padre no cocina, aunque debe ser lo único que no hace. Ahora, si hace falta, se pone. ¡Mi padre vale "pa tó".
ResponderEliminarLo mejor, lo mejor, encontrar la mesa puesta y en casa de mi madre. Todo un placer del que puedo disfrutar muy pocas veces!!
ResponderEliminarQué alegría da cuando llegas a comer y no has preparado nada y te encuentras con el tupper de tu madre o tu suegra. Yo pensaba que tú comías todos los días en casa, eso sí, no me explicaba como te daba tiempo a todo.
ResponderEliminarVoy a intentar estar más por aquí, que os echo de menos.
Besos a todas
Tu padre tiene mucha razón como en casa nada, en casa o en casa de alguien de mucha confianza léase madre.
ResponderEliminarEstuve un tiempo que comía en restaurantes o bares y es tremendo lo que hay por ahí
Besos
Emma
Cada día me cuesta más meterme en la cocina; para mí es un lujo, mejor que cualquier regalo, que me esperen en casa con la mesa puesta.
ResponderEliminarMaria LUisa,
ResponderEliminarHoy he comido fuera, de menú y no veas como he llegado. PUff! Como una pelota. Claro que también he comido todo: el primero, el segundo , el postre y el café.
Alegría,
Si no cocinas, no vale decir que como en casa en ningún sitio, jajaaaa.
Orange,
Parece que estamos de acuerdo en eso: a mesa puesta y en casa muy allegada con los platos que nos gustan.
Yoli,
Conste que mi tupper era mi tupper de sobras.
Me alegro de verte por aquí. Nosotras también te echamos de menos.
Emma,
Cuando comemos por ahí fuera, no sé, sueles dar con algún sitio en el que dan más o menos loq ue te gusta. Yo iba a un bar muy cutre, muy cutre cuando comía todos los días de menú, pero el cocinero, salí y me decía lo que podía y lo que no, y si no había nada en el menú apto para mí, me apañaba algo.
Anónimo,
Esa opción no la habíamos contemplado, creo. ¡¡A mí nunca me esperan en casa con la mesa puesta! Sí que es un lujo, sí.
En casa. Siempre en casa.
ResponderEliminar