Os presento a mi nueva amiguita la amasadora del Lidl. Creo que es una gran ayuda y aunque he leído y además me han contado que es única para montar claras y nata (sin hacerla mantequilla), yo sólo puedo hablar de lo que he probado y es a amasar con ella. Si el aparatejo es nuevo, lo mejor es no probar con una receta que lo sea, así que sólo me he atrevido a hacer unas pequeñas modificaciones sobre la receta del "pan de verdad"
Esta vez utilicé levadura fresca (medio taco de levital) y lo puse a espumar con un dedito de leche tibia y una cucharadita de azúcar. En vaso de plástico sube antes.
En la amasadora hacemos la mezcla de harina con los siguientes ingredientes: 100 gr. de almidón dulce de mandioca, 50 gr. de maizena, 50 gr. de harina de arroz, 100 gr. de leche desnatada en polvo, 1 cucharadita de goma xantana, sal.
En un cazo ponemos 200 ml de agua fría y tres cucharadas (no colmadas) de almidón agrio de mandioca, mezclamos bien y lo ponemos al fuego hasta que obtenga esta consistencia de chicle.
Una vez templado, añadimos a nuestra harina el chicle, un huevo y dos cucharadas de aceite de oliva.
Y después la espuma.
Amasamos durante 4-5 minutos.
Sobre un papel de cocina engrasado hacemos bolitas aplastadas (con esta cantidad me salieron siete) y dejamos en un lugar templado no más de una hora, aunque no doble su volúmen. Aunque la masa es algo pegajosa, con las manos mojadas se maneja a la perfección.
Metemos en el horno precalentado a 170º hasta que nuestros panecillos estén bien doraditos.
Y rellenamos con lo que más nos guste.
Espero que os haya gustado.
Con esta receta me despido de todos hasta el lunes ¡¡¡Me voy de puente!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario