Vivimos esa época del año llena de eventos y compromisos sociales en los que, más que nunca, los celiacos, y todos los que llevan algún tipo de dieta, tenemos nuestras limitaciones. En la inmensa mayoría de los casos, nuestros anfitriones, los novios o cualquier persona que prepare el evento o fiesta, está ya concienciado con ello. Son muchos los que nos piden en la misma invitación que avisemos si padecemos algún tipo de alergia o intolerancia y son ya una gran mayoría también los restaurantes que incluyen menús específicos para nosotros. Sin embargo, desde aquí debemos alertar de que, en ocasiones, la persona que cocina, organiza o sirve la mesa comete errores, se confía y piensa que el ofrecerte un plato de comida es suficiente. Así que, si quieres que tu invitado celiaco disfrute de tu fiesta sin sorpresas ni sobresaltos, apunta la regla de oro:
Ante la respuesta de "todo controlado" o "no hay problema" no hay que conformarse. Realiza un pequeño seguimiento, pregunta y cerniorate de que todo será según lo previsto.
Ante la respuesta de "todo controlado" o "no hay problema" no hay que conformarse. Realiza un pequeño seguimiento, pregunta y cerniorate de que todo será según lo previsto.
Y ¿cuales son estas cosas que fallan y hacen que acabemos sintiéndonos incómodos? ¿Cómo podemos evitarlo?
Aquí unas cuantas ideas para que organices tu boda o fiesta sin fallar a los celiacos.
Aquí unas cuantas ideas para que organices tu boda o fiesta sin fallar a los celiacos.
1. Formación: No sólo el maitre o el cocinero, también el camarero encargado de servirte, debe estar informado de tu dieta y tus limitaciones para poder ayudarte. Las personas que te han invitado ya han hecho su parte y confían en que así será.
2. Coktail: Un ir y venir de bandejas llenas de canapés, rebozados, tempuras y crujientes que pasan por nuestro lado sin poder probarlo. El señor del jamón, si es que lo hay y si es que no le han puesto picos por encima, es nuestra salvación. ¿Qué tal un par de ideas para preparar platos para nosotros? Jamón, queso, lomo, salpicón, revuelto, brochetas de carne, pescado, pollo, frutas o verduras, encurtidos, tortilla ... Cualquier cosa es mejor que estar mirando como comen los demás.
3. Bebidas: Refrescos, vinos y destilados ... Casi todas estas bebidas son aptas para celiacos y no faltan en ninguna fiesta. ¿Qué tal añadir la cerveza entre las bebidas que se nos ofrecen? Los celiacos podemos beber determinadas marcas aptas para nosotros. Algunas son muy comerciales y fáciles de conseguir (Ámbar, Daura).
5. Servicio: Los celiacos somos, casi siempre, los últimos en ser servidos en la mesa. En ocasiones, además, el tiempo que transcurre entre que se sirve el plato al último de nuestros compañeros de mesa y el nuestro, es demasiado. No sólo nosotros tenemos que esperar, sino también aquellos que comparten mesa con nosotros lo cual nos provoca cierta incomodidad. Es fácil de solucionar ¿no?.
6. Pan: Nos gusta el pan. Sin gluten, pero pan. Pan de verdad, del de mojar en la salsa, el crujientito y con corteza (también existe), no el de molde. A veces a ustedes se les olvida, pero así es. Con esto queda dicho todo. ¡Ah no! Una cosita más: si ponen pan, lean las instrucciones del envase para su consumo: si sacan el pan del paquete y lo sirven sin más, puede que no estén poniendo un pan crudo. De verdad: esto pasa.
7. Comida o cena: Poco que decir y casi nada que objetar. Se han puesto ustedes las pilas y es raro que no tengamos una comida de nivel con todos los platos. Si acaso una pequeña sugerencia: intenten adaptar los platos del menú. Es más fácil de lo que parece.
8. Postre: Esto ... ¿cómo decirlo educadamente?: No queremos fruta. Por muy bonita que nos la sirvan, por muy cortada que esté y en un plato divino, la fruta es fruta. Se nos saltan las lágrimas cuando vemos comer tarta y helado a los demás mientras nos enfrentamos a la macedonia. Se sorprenderían ustedes de la cantidad de helados, por ejemplo, que pueden encontrar sin gluten. Se sorprenderían aun más si supieran que es probable incluso que el helado que han puesto al resto de invitados puede ser sin gluten. ¿Lo han comprobado?
9. Chuches: Es tendencia en cualquier fiesta ofrecer gominolas y chucherías a todos los invitados y no sólo a los niños. Después del postre, en la barra o en el baile es más que probable que haya cestos con dulces para los invitados. Al igual que con los helados, muchas marcas son sin gluten, pero si no lo sabemos ... no comemos.
10. Recena: El plus de los plus en las fiestas de noche. Cocktail, cena, copa, baile y .. recena. Otro gran momento donde tus amigos y familiares se tiran con ansia viva hacia las bandejas y donde tú sólo miras y empiezas a soñar con llegar a tu casa y asaltar la nevera. ¿Qué tal ese pan que compraron para la cena con un poco del jamón que sobró del cocktail?
3. Bebidas: Refrescos, vinos y destilados ... Casi todas estas bebidas son aptas para celiacos y no faltan en ninguna fiesta. ¿Qué tal añadir la cerveza entre las bebidas que se nos ofrecen? Los celiacos podemos beber determinadas marcas aptas para nosotros. Algunas son muy comerciales y fáciles de conseguir (Ámbar, Daura).
4. Identificación. Preferimos el anonimato y tenemos un nombre. El novio o la novia, la mamá de la comunión o la persona que ha organizado el evento lo conoce. Llegar a la mesa y preguntar a voz en grito "¿El celiacooooo?, no resultada agradable.
5. Servicio: Los celiacos somos, casi siempre, los últimos en ser servidos en la mesa. En ocasiones, además, el tiempo que transcurre entre que se sirve el plato al último de nuestros compañeros de mesa y el nuestro, es demasiado. No sólo nosotros tenemos que esperar, sino también aquellos que comparten mesa con nosotros lo cual nos provoca cierta incomodidad. Es fácil de solucionar ¿no?.
6. Pan: Nos gusta el pan. Sin gluten, pero pan. Pan de verdad, del de mojar en la salsa, el crujientito y con corteza (también existe), no el de molde. A veces a ustedes se les olvida, pero así es. Con esto queda dicho todo. ¡Ah no! Una cosita más: si ponen pan, lean las instrucciones del envase para su consumo: si sacan el pan del paquete y lo sirven sin más, puede que no estén poniendo un pan crudo. De verdad: esto pasa.
7. Comida o cena: Poco que decir y casi nada que objetar. Se han puesto ustedes las pilas y es raro que no tengamos una comida de nivel con todos los platos. Si acaso una pequeña sugerencia: intenten adaptar los platos del menú. Es más fácil de lo que parece.
8. Postre: Esto ... ¿cómo decirlo educadamente?: No queremos fruta. Por muy bonita que nos la sirvan, por muy cortada que esté y en un plato divino, la fruta es fruta. Se nos saltan las lágrimas cuando vemos comer tarta y helado a los demás mientras nos enfrentamos a la macedonia. Se sorprenderían ustedes de la cantidad de helados, por ejemplo, que pueden encontrar sin gluten. Se sorprenderían aun más si supieran que es probable incluso que el helado que han puesto al resto de invitados puede ser sin gluten. ¿Lo han comprobado?
9. Chuches: Es tendencia en cualquier fiesta ofrecer gominolas y chucherías a todos los invitados y no sólo a los niños. Después del postre, en la barra o en el baile es más que probable que haya cestos con dulces para los invitados. Al igual que con los helados, muchas marcas son sin gluten, pero si no lo sabemos ... no comemos.
10. Recena: El plus de los plus en las fiestas de noche. Cocktail, cena, copa, baile y .. recena. Otro gran momento donde tus amigos y familiares se tiran con ansia viva hacia las bandejas y donde tú sólo miras y empiezas a soñar con llegar a tu casa y asaltar la nevera. ¿Qué tal ese pan que compraron para la cena con un poco del jamón que sobró del cocktail?
Fotos: Pinterest.
¿Se os ocurren más ideas?
Totalmente de acuerdo en todo!!!
ResponderEliminarYo sugeriría a los anfitriones que no se conformen con un "No hay problema" y que cuando se elabore el menú rellenen, al lado, la alternativa de cada aperitivo, entrante, plato, postre. Verán como el establecimiento se dejaba huecos vacíos.
Pues mañana mismo lo añado, porque muchos se confían y luego pasan las otras 10 cosas.
EliminarMuy buen post Nuria (como todos) solo hacen falta ganas un poco de voluntad e información.
ResponderEliminarComo tu bien dices seguro que mucho de lo que ponen ya es sin gluten.
Gracias!!! Un poco de ingormación h otro poco de buena voluntad y adios a los problemas!
Eliminar1) las recenas son peligrosas. Menos personal y quizás el formado ya no esté. Mucho desorden y mezclas de restos. Mejor, q cuiden lo nuestro aparte, y lo reserven.
ResponderEliminar2) los graneles de chuches y cosas aptas, se contaminan con manos y cubiertos. Mejor en bolsita, no?
Saludos, Guiñol
Hay que reconocer que en los últimos años ha mejorado este tema bastante. En las dos últimas bodas que he tenido he podido disfrutar hasta de la mesa de chuches porque era toda sin gluten, lo que te demuestra que si hay ganas, interés y buena voluntad se puede!
ResponderEliminarEso si, aun queda mucho por aprender para cumplir los 10 puntos! Por que la dichosa frutita sigue apareciendo ..
Besotes
Son ideas estupendas que en algunos restaurantes, hoteles y catering (pocos aun por desgracia) se llevan a cabo, creo que es una manera muy buena de controlar un poco el tema de la contaminación cruzada y tener más controlado el tema.
ResponderEliminarEstupenda entrada.
Un abrazo
Genial post Nuria ¡¡¡¡ absolutamente de acuerdo en todo. Los mas pequeños tambien hacen esa reflexion aunque no sean capaces de ponerlo en una lista...o sí...mi peque para su comunion lo tuvo CLARISIMO asi que él mismo hizo de "Pepito Grillo" cuando nos confeccionaron el menu, sin cortesías... el quisoTODO SIN GLUTEN para TODO EL MUNDO. Fue la caña :)
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