El chocolate me pierde. Me gusta tanto que, por temporadas, tengo que dejar de comprarlo para no comerlo. Otras veces me lo pide el cuerpo como si fuera una auténtica adicción y todas las noches, después de una horita de haber cenado voy a la nevera a por él. Cuando llevo haciendo esta maniobra unas cuantas noches, mi piel se resiente de muy mala manera, y ni toda mi colección de cremas y ungüentos consigue que la marca del chocolate desaparezca. Conmigo no se cumple lo de un minuto en la boca y toda la vida en el trasero, pero sí en la cara por una buena temporada. Pero ¿qué son las fiestas navideñas más que un cúmulo de excesos en todos los sentidos? ¿Que importa un kilito más o un granito? De perdidos al rio, y como soy de las que disfrutan de las cenas y comidas navideñas, a "mesa puesta" o "servilleta prendida" me pude permitir el lujo de meterme en la cocina con la única finalidad de preparar el postre, mientras mi pobre madre se hartaba de cocinar el resto de los platos.
¿Y cual es la ventaja de que sea el celiaco de la familia el que prepara el postre? Pues a vosotros no hará falta que os lo recuerde: la seguridad y, por qué no decirlo, que le tenemos cogido el aire o la medida a algunas cosas, o que disponemos de ingredientes que no son muy habituales en el resto de los hogares de nuestro entorno. En este caso, la receta de mi brownie, sólo lleva tres cucharadas de harina, pero ¿Conocéis a alguien que tenga harina de arroz en casa? ¿Sirve para algo más que para preparar un bizcocho a un celiaco?. Así que, normalmente, cuando alguien te invita a comer a su casa, le supones un problema. A pesar de esto hay personas que tienen muy buena voluntad (ya di ayer buena muestra de ello), aunque yo, lo reconozco, sufro viendo como sufren ellos por no meter la pata, por acertar en todo, por comprarte los ingredientes aptos y las molestias que se toman a veces me agobian, quizás porque para mi hay cosas que ya no son molestia. Lo que es la costumbre ¿no?
¿Y cual es la ventaja de que sea el celiaco de la familia el que prepara el postre? Pues a vosotros no hará falta que os lo recuerde: la seguridad y, por qué no decirlo, que le tenemos cogido el aire o la medida a algunas cosas, o que disponemos de ingredientes que no son muy habituales en el resto de los hogares de nuestro entorno. En este caso, la receta de mi brownie, sólo lleva tres cucharadas de harina, pero ¿Conocéis a alguien que tenga harina de arroz en casa? ¿Sirve para algo más que para preparar un bizcocho a un celiaco?. Así que, normalmente, cuando alguien te invita a comer a su casa, le supones un problema. A pesar de esto hay personas que tienen muy buena voluntad (ya di ayer buena muestra de ello), aunque yo, lo reconozco, sufro viendo como sufren ellos por no meter la pata, por acertar en todo, por comprarte los ingredientes aptos y las molestias que se toman a veces me agobian, quizás porque para mi hay cosas que ya no son molestia. Lo que es la costumbre ¿no?
Así que, si me invitas a cenar, tranquilo: Yo llevo el postre.
Brownie:
200 gr. de chocolate Nestle postres.
90 gr de mantequilla
4 huevos
9 cucharadas de azúcar.
3 cucharadas de harina de arroz
Una pizca de bicarbonato.
Fundir el chocolate con la mantequilla y dejar enfriar. Mientras, batir las yemas con el azúcar hasta que esté espumoso. Añadir el chocolate fundido, mezclar, y añadir la harina con el bicarbonato tamizada. Agregar las claras montadas a punto de nieve y envolver suavemente. Cubrir un molde cuadrado con papel para el horno y engrasar bien con mantequilla. Hornear 25 minutos a 180º.
Nunca defrauda.
...Yo probé ese brownie...y estaba riquísimo!! Tenía un toque especial,quizá fuera la harina de arroz...o quiza tus manos!
ResponderEliminarBesito fuerte!
Cuando te traes el postre?
ResponderEliminarMis compis de trabajo llevan esperando todo el mes a que les lleve un brownie y no creo que tarde mucho en hacerlo. Hay que cumplir las promesas.
El tuyo, con esas nueces haciendo de corona, tienen una carita de ... comeme!
Besitos sin gluten
Elena:
ResponderEliminarTe dio tiempo a probarlo? Pues yo pensé que no había quedado. Serán los comensales, que son muy agradecidos.
Maria Luisa:
No me comprometas ... no me comprometas, que yo cuando voy pa'llá ¡¡no hago ni un huevo!! Bueno, miento, algo tengo que hacer, pero ni una filigrana, comida de supervivencia y los homenajes en la calle. Aunque no estaría mal de primero una merlucita con crujiente y de postre, por ejemplo, un brownie. Anda, hazselo a los compis, que esto no te va a llevar toda la noche. Supongo que tendrás tu propia receta, pero esta sale muy buena.
Siii!! Lo probé! El dia de Año Nuevo aún quedaba algun troxito para probarlo! A ver si haces otro!(y me avisas claro...!!)
ResponderEliminarBesito!
Yo tengo otra receta, pero ¿y si cambio la harina de arroz por la normal, las demás proporciones no varían?
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