¿Y si tuvieras una jefa (o eso) que se come tus galletas de 3 euros sin gluten? Sí, sí, ya sé que hay que compartir, y que ella me ha ofrecido sus galletas pura fibra con no sé qué, compradas en tiendas especializadas para gente con rarezas extrañas para comer (como ella), y su té con gingseng o "té con energia señora" -leer con acento ucraniano que es como lo dice la chica que viene a limpiar cuando le damos al innoble deporte del critequeo del superior-, y que otras tantas te he dicho que noooo ... que serán con fibra ... que serán ecológicas ... que estarán muy ricas ¡¡¡pero que tienen gluten!!!
Capulla!! Comprate unas marías que valen un euro o las tuyas maravillosas biológicas, ecológicas y todos los ógicos del mundo, que tomas "porquetúquieres", porque si yo me quedo sin galletas, maja, ¿a donde voy? ¿eh? Te pido una horita para comprar las mías. No ¿no? Pues entonces.
Ay, ay ... tanto estudio y tanto rollo y ¿todavía no te han explicado que las cosas se piden "por favor?. Pues vaya.
Pd.1:Curiosidad sobre "la personaja": También es amiga de pulirse otros elementos, digamos, de la higiene íntima femenina y ¡¡quejarse cuando no hay!!!
Pd.2: Por cierto ¿habéis probado las de la foto? Me recuerdan mucho a los pims, están muy logradas y muy buenas.
¡Lamentable!, ¡totalmente lamentable!. Pero, eso demuestra que el tener estudios no significa ser educado y mucho menos importarle los problemas de las compañeras ¡perdón! subordinadas (según ella).
ResponderEliminarRespecto a las galletas, están buenísimas.
Besotes,
Ana y Víctor.
Jajajaja vamos, el típico personaje pidón que hay en todos los sitios... ayyyy.
ResponderEliminarDeberías esconderlas o algo jejeje.
Ah! Por cierto! Las galletas están buenísimas. A mí también me recordaron mucho a las Pims. De hecho, antes de que me diagnosticaran la EC, me encantaban las pims de fresa y naranja, y un día en la revista Mazorca vi el anuncio de estas galletas y... ya puedes imaginar a dónde fui en seguida! Jajaja. Un rato después, estaba en el sofá de mi casa viendo la tele acompañada de las Orangino jejeje.
Un beso!
Adoro esas galletas, son mi perdición.
ResponderEliminarLa gente como tu jefa también son mi perdición, porque me ponen de una mala leche.... arggggggg. Impresionante la falta de respeto y educación. Cómo puee haber por el mundo gente con tantísimo morro?
Caminantes:
ResponderEliminarEspero que aparte del "agravio" hayais apreciado el puntito de humor en mi post. A mí, de verdad, no me importa compartir mis cosas con nadie, lo que pasa es que veo desconsiderado no comentarlo siquiera, jolines, que yo no puedo tirar del bar de la esquina y ella puede salir y comprarse dos sobaos pasiegos.
Prydwen,
Si fuera pidona, pues eso diríamos, pero no hija, esta es de lo que hay es España es de los españoles hale, y se sirve sola, pero de todo lo que pilla ¿eh? Que no voy a entrar en detalles del baño, pero ahí es otra guerra.
Ay la pims, te juro que cuando vi esto pensé "como se acerquen sólo un poquito a las originales ya tienen mercado". De las otras me comía la cajita de una sentada, con estas hay que controlarse. Yo también las vi en Mazorca.
Saha.
La verdad es que gente con cara hay en todas partes, así que mira, por lo menos nos sirve para hablar de ellos, y a mí personalmente, hasta para reirme.
Añado que las galletas en cuestión eras las cookies estas de Hacendado, que están malísimas, por cierto y que ella moja en su "te con energía señora". Puaaaaaaggg.
Es que la educación hoy en día es un valor a perder jamía, ni con estudios ni sin ellos. Si encima se trata de un jefe,sienta peor, oye.
ResponderEliminarLas galletas las he visto en publicidad pero no las he visto en ninguno de los comercios habituales donde compro sin. Si las veo, las pillaré enseguida, pero me da a mí que a Martín no le van a hacer demasiada gracia.
Besitos
Maria Luisa:
ResponderEliminarPues lo mismo a Martín no le van, efectivamente, no sé el saque que tendrá él y si será de los que lo prueban todo, mis hijos, desde luego, no son así. Yo no recuerdo a ninguno de los dos comiendo las originales jamás porque no les van las mermeladas, y eso que yo las compraba a menudo. Cuando traje estas E. tampoco las ha comida, así que ¡¡¡toditas para mi!! Que se le va a hacer.
Besos
Tu jefa lo que es, es una jeta. Además de una maleducada. Tendrías que ponerle algún día encima de tu mesa, algún paquete de galletas asqueroso, ya veras como no volvía a mangarte las tuyas!! Además de lo ibas a disfrutar viendo su cara de asco!!
ResponderEliminarBesito fuerte!
Hola Elena.
ResponderEliminarLa opción de las galletas, va a ser que no ¡¡¡que se las compre ella!!!
Uys Hannah, pero eso que sales ganando. Todas para tí!!!.
ResponderEliminarZerogluten, yo pedí en la herboristería que me las trajesen. Si traen cosas de Schar para ellos es tan fácil como llamar al almacen y preguntar si las tienen. O encargártelas. Personalmente a mí me apasionan. (y las pim's en su época.. también!!!)
Saha,
ResponderEliminar¿Y no te gustaban las Petit Ecolier? Ay Dios, que placer. Que buenas ... Cuando nació mi hijo, mientras le daba el pecho me apretaba una caja enterita (tampoco es que traiga muchas) y ahora, tampoco es de extrañar, pero a él le encantan.
A ver si no sacan un sucedaneo de esas.
Vaya morro!! Guárdatelas y compras otras que no le gusten :)
ResponderEliminarNo las he probado, la verdad es que a mi las galletas no me gustan demasiado. Solo como las del Mercadona y unas rosquillas de Airos.
glutoniana
Jajajajajaja, qué bueno el post y la pava de jefa que tienes!¡qué autentica! También las Orangino, desde que las descubrí son mi kit-supervivencia-oficina.
ResponderEliminarEn mi oficina tengo a todo el mundo amenazado con que si me tocan el bocadillo de la nevera me pongo muy, pero que muy, violenta y peligrosa...
Es lo que tu dices Hannah, ellos siempre se pueden bajar a la panadería de al lado.
Podrías llevar un día unas marías, quizá no conozca las galletas "normales" y lo ricas que están y de paso te sale más baratito.
Un besazo
Hola NIeves!!
ResponderEliminarNo había visto tu comentario. Me alegro muchísimo de verte por aquí, ya lo sabes.
¿Tu crees que alguien en su sano juicio se comería tu bocadillo pudiendo comerse uno con pan de verdad? Hay que estar mal, como la tipeja esta.